Sophia is an emotionally guarded teenager who lives through her phone and struggles to be present with the people around her. She is navigating new, heavy emotions while trying to understand what they mean and who she is. Over the course of the story, Sophia evolves from an irritable and distracted girl to a compassionate and self-aware person.

Ava is playful and curious. She uses her humour to connect with the people around her. She craves attention, often teasing Sophia to get a reaction. But, beneath her mischief is a deeply caring child who steps up when it matters most.

Gigi is Ava's and Sophia's grandmother. She is warm, loving and grounded. She’s the kind of grandmother who shows up with cookies on a random Saturday and stands up for you in front of your parents, even when you might be in the wrong. Though she struggles to understand her granddaughters’ digital world, she simply wants to connect with them and rebuild the connection that has drifted as they have gotten older.

Wren is Ava’s and Sophia’s mother. Ambitious and career-driven, she often prioritizes work over time with her children. She, too, has fallen into the digital world, spending much of her time on her phone, working or scrolling, at the expense of meaningful connections with her family.

James is Ava’s and Sophia’s father and Gigi’s son. As the manager of a prestigious company, he spends most of his time working and is less involved in day-to-day parenting, often unsure how to handle conflicts between the girls or what to say.

Llegando de San Petersburgo a Tijuana, ahora busca asilo en Estados Unidos después de huir de la guerra contra Ucrania y de la creciente hostilidad hacia las personas LGBT. A pesar de la naturaleza de su situación política, rechaza el ser visto como víctima, y evita categorizarse como refugiado, inmigrante o un queer desamparado. Es blanco, alto y delgado, pero con rasgos suaves; más tierno que rudo, pese a su personalidad explosiva e ingeniosa. Su cuerpo parece desproporcionado, como si hubiera crecido más rápido que su alma, más rápido que sus propias experiencias. Es atractivo de una manera inusual—no como un modelo, pero sí de una forma que llama la atención. Su juventud es evidente, aunque está al borde de la madurez. La curiosidad lo define, y se ve reflejada en su mirada incluso cuando tiene miedo o siente ira. No es tonto ni ignorante, pero queda claro que le falta mucho por aprender. Suele confiar en sus impulsos y emociones antes que en el pensamiento racional. Evita el contacto visual, especialmente ante personas que ejercen poder sobre él (mentores, tutores u otras figuras de autoridad). Cuando su mirada sí se sostiene, es porque realmente desea comprender a la otra persona. Ingresó a la universidad, pero no terminó. Habla inglés, aunque un inglés globalizado. Su personalidad es digital antes que física: creció en espacios queer online. Le gustan los memes y el humor seco que juega con lo ofensivo. Su ropa suele quedarle grande, en parte por elección, y en parte porque suele venir de las donaciones recibidas en los albergues por los que ha pasado en su transcurso hacia Estados Unidos. Le atrae la tecnología análoga, quizá como una forma de escapar de lo que le resulta demasiado natural: las redes sociales, las apps de encuentros gay, la naturaleza transaccional de la validación digital, y la obligación social de dejar una huella virtual. En las apps, se permite explorar alter egos: alguien difícil de conseguir, más maduro, incluso misterioso; pero lo hace como un mecanismo de defensa ante la intimidad real, que teme no saber sostener. A lo largo de la película, Maksim experimenta con su apariencia física: se pinta las uñas, se viste de formas menos binarias, e incluso cambia el color de su cabello.

Llegando de San Petersburgo a Tijuana, ahora busca asilo en Estados Unidos después de huir de la guerra contra Ucrania y de la creciente hostilidad hacia las personas LGBT. A pesar de la naturaleza de su situación política, rechaza el ser visto como víctima, y evita categorizarse como refugiado, inmigrante o un queer desamparado. Es blanco, alto y delgado, pero con rasgos suaves; más tierno que rudo, pese a su personalidad explosiva e ingeniosa. Su cuerpo parece desproporcionado, como si hubiera crecido más rápido que su alma, más rápido que sus propias experiencias. Es atractivo de una manera inusual—no como un modelo, pero sí de una forma que llama la atención. Su juventud es evidente, aunque está al borde de la madurez. La curiosidad lo define, y se ve reflejada en su mirada incluso cuando tiene miedo o siente ira. No es tonto ni ignorante, pero queda claro que le falta mucho por aprender. Suele confiar en sus impulsos y emociones antes que en el pensamiento racional. Evita el contacto visual, especialmente ante personas que ejercen poder sobre él (mentores, tutores u otras figuras de autoridad). Cuando su mirada sí se sostiene, es porque realmente desea comprender a la otra persona. Ingresó a la universidad, pero no terminó. Habla inglés, aunque un inglés globalizado. Su personalidad es digital antes que física: creció en espacios queer online. Le gustan los memes y el humor seco que juega con lo ofensivo. Su ropa suele quedarle grande, en parte por elección, y en parte porque suele venir de las donaciones recibidas en los albergues por los que ha pasado en su transcurso hacia Estados Unidos. Le atrae la tecnología análoga, quizá como una forma de escapar de lo que le resulta demasiado natural: las redes sociales, las apps de encuentros gay, la naturaleza transaccional de la validación digital, y la obligación social de dejar una huella virtual. En las apps, se permite explorar alter egos: alguien difícil de conseguir, más maduro, incluso misterioso; pero lo hace como un mecanismo de defensa ante la intimidad real, que teme no saber sostener. A lo largo de la película, Maksim experimenta con su apariencia física: se pinta las uñas, se viste de formas menos binarias, e incluso cambia el color de su cabello.

Indigenous stand-up comic and sex club employee. Slightly perverted; isn't afraid of letting out her animalistic side...and helping others do the same. Role includes scenes of intimacy; coordinator will be onset.

Mino's sex club coworker.

Mino's sassy sex club coworker.

Sex club regular. Often spotted in his iconic latex bodysuit and rubber boots.

Comedy club spectator who shouts at Mino for kissing her elderly mother.

A composed, media-trained police officer delivering a public statement. They speak with clarity, professionalism, and calm authority while urging the public to come forward with information. Appears in a brief but impactful TV news segment viewed by the main characters.

A front-desk or investigative officer. Efficient, matter-of-fact, and emotionally neutral, they handle the couple’s inquiries with routine professionalism.

Retired senior Canadian lawyer. Polished, refined, and quietly commanding. He carries authority through stillness and measured words rather than volume.

Manager of a small, struggling care agency. Tired, pragmatic, and rule-focused at first glance, but with reluctant compassion beneath his professional exterior.

From a marginalized background, working low-income service jobs. Resilient, sharp, and unapologetic. Tough exterior with emotional honesty beneath the surface; someone who navigates the world with both armor and heart.

Non-Binary, 20s. Open Ethnicity. Kind but exasperated, Pat has accidentally made themselves a fixture at a job they don’t care for. Tormented by visions of their own death and a lackluster promotion, they’re desperately looking for an out. Affable and hardworking, but at their current age of 24, do they really want to be working in a burger joint forever? Character is non-binary, talent of any/all gender identity invited to apply.

Male Presenting, Late 20s to 30s. Open Ethnicity. Apathetic and lazy, entirely past his prime, Russel does just enough to not get fired. He’s not particularly liked by his coworkers, but his dryness and apathy is comforting to Pat. He is aware of the misery he’s inflicting on himself, but has no drive to change it. He might not be working at this fast food joint forever, but he has given up on any greater ambitions. MUST be comfortable with facial prosthetics.